Escucha

Historia:

Situado en las estribaciones de la sierra de San Just, entre los Parques Culturales del Maestrazgo y del Río Martín, el municipio de Escucha ofrece una experiencia única donde confluyen historia, tradición minera y paisajes inolvidables.

La imagen más representativa de Escucha en la actualidad es la antigua central térmica, símbolo del auge industrial que vivió la localidad hasta el cese de su actividad en 2012. Este periodo de esplendor minero, especialmente durante los años 80, transformó profundamente la fisonomía urbana, adaptándola a las necesidades de la actividad extractiva.

Uno de los mayores atractivos turísticos de Escucha es, sin duda, su Museo Minero, inaugurado en 2002 y ubicado en la parte alta del municipio, junto a la carretera principal. La visita a este museo se realiza a través de una mina auténtica, la histórica mina “Se Verá” (1890-1968), en la que se ha recreado con precisión el entorno de trabajo de los mineros, mostrando maquinaria original y escenas fieles a la realidad de una explotación minera. Es una experiencia inmersiva que rinde homenaje a la vida de un pueblo profundamente vinculado al carbón.

Además del legado industrial, Escucha conserva espacios con encanto como el trinquete bajo la iglesia o la casona noble, que alberga en su planta baja la histórica Lonja. La localidad también cuenta con un museo taurino, testimonio del arraigo de las tradiciones populares en la vida del municipio.

La sierra de San Just, con su majestuoso puerto y parajes como la fuente de las Suertes o la sima natural que alberga, ofrece a los visitantes escenarios ideales para el senderismo y la contemplación de la naturaleza.

En el núcleo urbano se erige la iglesia parroquial de San Juan Bautista, un templo originalmente de estilo gótico que fue reformado posteriormente con elementos barrocos. En las afueras, frente al cementerio, se halla la ermita de San Bartolomé, del siglo XVII, restaurada en 1994 y cargada de valor espiritual e histórico.

La pedanía de Valdeconejos, situada al otro lado de la coronación de San Just, se ha mantenido al margen de las transformaciones urbanísticas del auge minero y conserva intacta su estructura rural. En su ámbito destaca la Casa Rectoral, una construcción renacentista del siglo XVI, y la iglesia de Santo Domingo de Silos, que aún conserva su imponente portada barroca.

La historia de Escucha y sus alrededores se remonta a tiempos íberos, como lo demuestra la existencia de un antiguo núcleo asentado en el lugar que posteriormente ocuparía el castillo, testimonio del rico pasado de estas tierras.